España: Inclusión y convivencia en tiempos de COVID19

En enero de este año arrancó el proyecto “Educación integral e inclusiva en contextos de vulnerabilidad social”, que forma parte del Programa EPGO III. Desde las Comunidades Autónomas de Galicia, Asturias y Castilla y León en España, iniciamos las actividades de acompañamiento socioeducativo con jóvenes y centros educativos, buscando impulsar procesos de inclusión, convivencia pacífica y promoción de la igualdad de género en regiones rurales, barrios de mayor exclusión y centros educativos con alta diversidad sociocultural. En estos inicios, ninguna de las personas que conformamos el equipo técnico ni los equipos educativos con los que trabajamos de la mano nos imaginábamos los grandes cambios que estaban por venir.

«En todos estos meses hemos puesto a prueba la resistencia del sistema educativo y de los derechos humanos, entre otros muchos. De todo se puede aprender y lograr tener una educación transformadora donde las y los jóvenes puedan aprender a educar su corazón y su mente» Iris Trigo, voluntaria de Entreculturas en Galicia

Y es que este año 2020 nos está enfrentando a desafíos globales en todas las latitudes del planeta y, a la vez, nos está enseñando que las personas y comunidades estamos más interconectadas que nunca. Si algo transformador nos muestra la crisis generada por la COVID-19 es que las personas dependemos unas de otras, y que, por ello, necesitamos soluciones globales y compartidas. Ante este escenario de vulneración de derechos humanos, de ampliación de las brechas digitales y socioeducativas, este proyecto tiene una responsabilidad fundamental, con mayor pertinencia que nunca: promover una educación transformadora, integral e inclusiva en contextos especialmente afectados por las desigualdades sociales profundizadas. Y todo ello, trabajando en red con entidades y centros socioeducativos que apuestan por la educación como derecho y estrategia clave para construir entornos pacíficos, inclusivos e igualitarios.

En palabras de una de las participantes en el proyecto, Iris Trigo, voluntaria de Entreculturas en Galicia, “En todos estos meses hemos puesto a prueba la resistencia del sistema educativo y de los derechos humanos, entre otros muchos. De todo se puede aprender y lograr tener una educación transformadora donde las y los jóvenes puedan aprender a educar su corazón y su mente”.

El derecho a una educación que aborde las desigualdades ya presentes, ahora profundizadas por la COVID-19, es también una de las mayores preocupaciones de la juventud, educadores y educadoras y personas con las que trabajamos en el proyecto. Partiendo de este escenario, hemos logrado redirigir su planificación anual y adaptarnos a las nuevas necesidades expresadas, poniendo como prioridad el acompañamiento educativo y socioemocional en tiempos de distancia, brechas digitales y educativas, sobrecarga lectiva, y dificultades de convivencia en las comunidades con las que trabajamos.

  • Amplio mapeo y toma de contacto con diferentes centros socioeducativos, confirmando su implicación en el proyecto, a través de reuniones, presentaciones del proyecto, y análisis de necesidades en los centros.
  • Acompañamiento continuo en tres centros socioeducativos ubicados en contextos de exclusión social en las tres CC.AA.
  • Acompañamiento de un proceso socioeducativo con jóvenes en contexto de exclusión social en Castilla y León.
  • Talleres regionales y nacionales de formación con enfoque de cultura de paz e igualdad de género dirigidos a jóvenes y educadores y educadoras.
  • «Curso de estrategias comunitarias para la convivencia juvenil en tiempos de crisis» realizado durante 5 sesiones y trabajo continuo online en Galicia y Asturias, facilitando el acompañamiento integral de 15 educadores y educadoras de 11 centros socioeducativos, promoviendo su formación en herramientas de inclusión, coeducación para la igualdad de género, y convivencia. El curso ha sido evaluado como una experiencia necesaria y enriquecedora para el trabajo educativo de educadores y educadoras en tiempos de COVID-19, que será acompañada en su puesta en práctica el curso que viene. El 100% de las personas participantes evaluaba que el curso le ha sido de gran utilidad para integrar nuevas herramientas en el acompañamiento socioeducativo a jóvenes durante la crisis.
  • En las tres CC.AA se han llevado a cabo dos Asambleas formativas para un total de 19 educadores y educadoras, y dos Asambleas de Jóvenes adicionales contando con la participación total de 51 jóvenes (67% mujeres). En estas Asambleas trabajaron sobre el impacto que está teniendo la crisis de la COVID-19 en la igualdad de género y los desafíos de convivencia e inclusión social, aprendieron sobre herramientas de movilización e incidencia online que pueden incorporar en sus acciones solidarias, y cerraron con una acción de sensibilización dirigida a la ciudadanía, en la que lanzaron mensajes de solidaridad y acción para transformar las desigualdades que más les preocupan, usando las redes sociales (#RSJenacción).

“La Rede Solidaria Mocidade no se detuvo ante esta situación que estamos viviendo y buscó alternativas…”, afirma Hugo, alumno de 3º ESO del centro Virxe da Cela, en Galicia. “Tratamos temas como la incidencia política, en la que profundizamos bastante, el estado actual del medioambiente, la migración y la desigualdad que viven mujeres alrededor del planeta.”

El curso que viene nos plantea múltiples incertidumbres y desafíos, pero también nos anima a emprenderlos con esperanza: durante estos meses de proyecto hemos podido comprobar que, incluso en tiempos de crisis, las distancias son relativas, y el trabajo educativo en contextos de mayor vulnerabilidad social es posible y tiene más pertinencia que nunca. El proyecto ya está planificando los próximos encuentros formativos, una Jornada de Buenas Prácticas Educativas en Galicia, y el acompañamiento integral a los centros, jóvenes y profesorado participantes de las tres CC.AA. Seguimos avanzando en red, con la certeza de que la educación en valores de solidaridad global, convivencia, inclusión e igualdad de género es un pilar necesario e ineludible para dar respuesta a las desigualdades socioeducativas que ya estamos viviendo en España y en el mundo.

«Me comprometo a seguir manteniendo vivo el grupo solidario, para ayudarles a ser personas comprometidas, activas y responsables con su alrededor» Milagros, docente del IES Agra do Orzan, Galicia